Nota del editor: Este artículo fue publicado originalmente en inglés en respuesta al atentado ocurrido en El Paso en 2019.

Tengo sentimientos encontrados con respecto a la frase «están en nuestros pensamientos y en nuestras oraciones» [enlace en español].

Esta frase se ha convertido en la expresión que habitualmente se dice después de cada tiroteo masivo, y que se repite en tuits y declaraciones que buscan ofrecer condolencias a las familias y comunidades sacudidas por la tragedia. Al igual que muchas otras personas afectadas por la violencia con armas, no puedo evitar sentir frustración y cinismo cada vez que escucho a alguien decir que estaremos en sus «pensamientos y oraciones».

Han pasado seis años desde que recibí un disparo cuando un hombre armado abrió fuego en el New River Community College de Virginia [enlaces en inglés]. Cada vez que escucho en las noticias acerca de un tiroteo masivo, o de un niño que falleció después de encontrar un arma cargada en su casa, o de un suicidio o una muerte sin sentido por arma de fuego, me pregunto si la acción de los que ocupan puestos de poder alguna vez seguirá a los pensamientos y oraciones.

Como sobreviviente de un tiroteo, creo en la acción. Al mismo tiempo, creo en el poder de la oración. Conozco de primera mano lo que presenciar un tiroteo le hace a la mente, y lo que una bala hace al cuerpo, y creo que mi recuperación y sanación son el resultado directo de las oraciones que otros elevaron por mí.

Es natural sentir impotencia luego de un tiroteo masivo. Mientras lloramos las vidas de los que fallecieron en El Paso, Dayton y cualquier otra comunidad donde la violencia armada es una realidad cotidiana, puede parecer imposible encontrar las palabras para orar.

El hecho de que sea una sobreviviente no significa que pueda encontrar por mí misma una solución a la crisis de la violencia armada. Lo que sí puedo compartir, sin embargo, es una reflexión sobre algunas formas específicas y prácticas en que podemos orar por los sobrevivientes como parte de nuestra respuesta a la violencia armada.

Ore por el dolor, las heridas físicas y los tratamientos

El tratamiento de las heridas de bala es a menudo un proceso de prueba y error, en el cual los médicos pueden tardar días en averiguar cómo proporcionar los cuidados y el alivio necesarios. Para muchos sobrevivientes significa una recuperación que lleva años, y que puede incluir cirugías y rehabilitación física. Ore para que reciban alivio del dolor físico, para que las secuelas de las heridas sean mínimas y para que tengan la fuerza necesaria para perseverar en los tratamientos subsiguientes.

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Ore por las heridas invisibles

Los sobrevivientes han presenciado lo inimaginable, lo cual a menudo incluye ver cómo sus seres amados son heridos o asesinados. Son imágenes que nunca conseguirán borrar de sus mentes. Ya sea que hayan sido o no heridos durante una tragedia, se encuentran procesando su experiencia cercana con la muerte y preguntándose cómo será su nueva realidad. Muchos sobrevivientes se enfrentan a un trastorno de estrés postraumático, a la ansiedad y a la depresión. Ore por el trauma emocional que están afrontando. Ore para que tengan la posibilidad de acceder a consejería, terapia y cualquier tipo de tratamiento para la salud mental que necesiten.

Ore por sabiduría para los médicos, los enfermeros y todos los especialistas médicos que les brinden tratamiento

El personal médico asume una gran responsabilidad cuando brinda tratamiento y cuidado a las víctimas de un incidente. Oremos que tengan sabiduría cuando tomen decisiones de diagnósticos o tratamientos, que tengan manos firmes cuando realicen cirugías, que sean amables cuando hablen con sus pacientes, y que tengan resistencia y fortaleza al momento de brindar atención médica.

Ore para que sean protegidos de ver fotos e información sobre el tirador

Nunca olvidaré cuando me desperté y vi el rostro de la persona que me había disparado junto a mi fotografía en la primera página del periódico, o cuando vi mi nombre en las noticias nacionales. A medida que los videos y las fotos fueron difundidos en la cobertura periodística, oré para que los sobrevivientes fueran protegidos de escuchar hablar sobre el tirador, a fin de que esto no reviviera su trauma una y otra vez.

Ore para que no tengan pesadillas y para que puedan dormir y descansar

En mi caso, dormir fue una de las cosas que me resultaron más difíciles en los días posteriores al tiroteo. Me aterraba cerrar los ojos y, cuando lo hacía, sufría pesadillas. Después de un trauma tan fuerte, el cuerpo necesita descanso. Ore para que los sobrevivientes puedan dormir sin miedo.

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Ore por la provisión económica para los gastos médicos y otras necesidades

El impacto financiero de un disparo es devastador para las familias, especialmente si la persona herida era el proveedor de su casa o si vivirá con una discapacidad de por vida a causa del mismo. Por favor, ore por la provisión económica para las facturas del hospital, los cuidados posteriores, los recursos necesarios para recuperarse correctamente y el tratamiento continuo para la salud mental.

Ore por dirección y apoyo durante el proceso judicial

Cuando hay incidentes en los que los tiradores son detenidos, los sobrevivientes deben enfrentar un largo y tedioso proceso judicial lleno de procedimientos en juzgados. Se les pedirá que testifiquen sobre el peor día de sus vidas y serán obligados a escuchar los detalles traumatizantes del incidente. Conozco de primera mano lo abrumador que puede ser este proceso. Ore para que reciban el apoyo y la guía necesarios a medida que las autoridades trabajan para llevar a los tiradores ante la justicia.

Ore para que tengan un sistema de apoyo fuerte a largo plazo

Apoyar a un sobreviviente de un tiroteo no es una tarea de corta duración. Por favor, ore para que cada sobreviviente tenga un sistema de apoyo inquebrantable donde haya mucha gente que los quiera, los cuide, y no los abandone si las cosas se ponen difíciles. Ore para que los sobrevivientes no se sientan como si fueran una carga pesada para los que los rodean, sino que permitan que otros les sirvan.

Ore por la contención de parte de otros supervivientes

Contar con un sistema de apoyo de amigos y familiares es muy importante para un sobreviviente. Sin embargo, hay un tipo especial de apoyo que solo es posible cuando uno tiene la posibilidad de lamentarse con otro sobreviviente que puede comprender plenamente su sufrimiento y experiencia. Ore para que puedan establecer vínculos y reciban apoyo de personas que han pasado por lo mismo.

Ore para que no vuelvan a sentir el trauma cuando escuchen de otros tiroteos

Para un sobreviviente, puede parecer imposible experimentar verdadera sanación cuando tenemos que revivir constantemente nuestra experiencia con cada nuevo tiroteo masivo que ocurre. En cada ocasión nos inundan los recuerdos de nuestra experiencia. Para muchos de nosotros, esto incluye cosas como síntomas de trastorno de estrés postraumático (TEPT) y ataques de pánico. Ore para que Dios les proporcione una paz que sobrepase todo entendimiento y fortaleza cuando sean débiles.

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Siga orando

Si puedo convencer a alguien de que haga solo una cosa de esta lista, espero que sea esta: continúe orando. Para muchos sobrevivientes, incluyéndome a mí misma, el día del tiroteo no es el más difícil. El día más difícil viene después, cuando uno se enfrenta a una nueva realidad posterior al incidente. Cuando los mensajes de aliento dejan de llegar, cuando la gente deja de preguntarte cómo estás, cuando el ciclo de noticias cambia y empiezas a sentirte olvidado y aislado. Que la gente siga orando por ti meses y años después del tiroteo es una forma significativa de mostrar apoyo.

Dios conoce las necesidades de los sobrevivientes, por lo que no creo que sea necesario saber exactamente por qué debemos orar para poder hacerlo. Sin embargo, cuando reconocemos las necesidades específicas de los demás, entonces somos más capaces de empatizar con ellos, de amarlos y servirlos. También somos más capaces de reconocer el profundo y persistente trauma provocado por la violencia con armas que perdura mucho tiempo después de que las cámaras de los noticieros se han marchado.

Espero que esta lista sea de ayuda para orar por las víctimas de los tiroteos. Y aunque mi oración es que no haya una próxima vez, espero que también sea útil en caso de que sí suceda.

Taylor Schumann es escritora y sobreviviente de un tiroteo. Colaboró en el libroIf I Don't Make It, I Love You: Survivors in the Aftermath of School Shootings. Vive con su marido y su hijo en Charleston, Carolina del Sur.

Speaking Out es una columna de opinión para invitados de Christianity Today y, a diferencia de un editorial, no representa necesariamente la opinión de la publicación.

Traducción por Sofía Castillo.

Edición en español por Livia Giselle Seidel.

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